“Nuestras peores sospechas se han
confirmado: estamos comiendo un arroz transgénico sin saberlo,”
dijo Gustavo Ampugnani, de la campaña contra los transgénicos de
Greenpeace México. “Y mas peor es que esta contaminación viene de
campos experimentales y ha llegado ilegalmente, por lo menos desde
agosto pasado,” continuó.
Durante el año pasado, se descubrió
que volumenes enormes de arroz estadounidense fueron contaminados
con LLRICE601 y por eso los destinos de exportación, desde Europa
hasta Japón pusieron en lugar unas medidas de prevenir la llegada
del arroz contaminado. El USDA aprobaron retroactivamente la
variedad para cultivación en los Estados Unidos (aprobación no es
necesaria en los EE UU), pero la variedad experimental no está
aprobada para ningúmercado de exportación, incluso México. La
Federación de Productores de Arroz adoptó un plan de emergencia
para mantener limpia la siembra para el año próximo, aunque la
mayoría de la siembra 2006 estará vendida.
“Estos resultados y las últimas
declaraciones del USDA prueban que la contaminación no sólo es
posible, pero está alcanzando las proporciones epidémicas,” añadió
la Dra. Doreen Stabinsky, científica Greenpeace basada en los EE
UU. “El sistema regulatorio estadounidense claramente no puede
protegernos- ni a los pueblos aquí ni tampoco a los pueblos en el
extranjero- de las variedades transgénicas no aprobadas y no
probadas científicamente. La única manera en la que los gobiernos
del mundo pueden proteger a los ciudadanos es el corto de la compra
de productos agriculturales de los Estados Unidos.
Greenpeace está presionando a los
oficiales en México para motivar acciones para prevenir la
importación de los arroces contaminados desde los EE. UU.,
especialmente con las reuniones pendientes entre los presidentes
Calderón y Bush durante la semana que viene. Información específica
sobre los resultados es disponible.
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Exp. contact date: 2007-04-09 00:00:00