– México fue uno de los primeros países en firmar el tratado, 66 países de los 193 Estados miembro de la ONU han firmado ya. 

– México debe ser también de los primeros países en ratificarlo para mostrar su real compromiso. Se necesitan mínimo 60 ratificaciones para que entre en vigor.

– Un gran avance pero no hay congruencia si no se apoya también la moratoria a la minería submarina

Ciudad de México, 21 de septiembre de 2023. La firma del Tratado Global por los océanos es un acto simbólico y protocolario, que muestra el interés de los países por la eventual ratificación del Tratado. La ratificación es un siguiente paso e implica el consentimiento del país de hacer obligatorio el Tratado y bajarlo a sus leyes nacionales, puede llevar más tiempo según los procesos nacionales de cada país pero es urgente acelerar el proceso para no retrasar más la protección de los ecosistemas marinos. Para avanzar, es necesario que al menos 60 países ratifiquen el Tratado para que pueda entrar en vigor. Hasta el momento, 66 países han firmado su aprobación

México fue de los primeros países en firmar el Tratado, lo que muestra el compromiso del país con los acuerdos internacionales en pro del cuidado del medio ambiente. Ahora el llamado es a que México mantenga este compromiso y a que éste se materialice en la ratificación lo antes posible. Desde Greenpeace México se hace la invitación a la canciller Alicia Bárcena y a la Secretaría de Relaciones Exteriores, a que México sea también uno de los primeros países en ratificarlo, convirtiéndolo en uno de los líderes en la región en la protección de los océanos y ejemplo para el continente americano.

De la misma forma, el compromiso de México con la protección de los océanos que muestra al firmar este Tratado debe verse también en el apoyo del país a una moratoria que frene el avance de la minería en aguas profundas, una industria incipiente que de iniciar ocasionaría graves efectos en los ecosistemas marinos, y en cuyo caso, México representa un país estratégico para esta actividad extractiva, debido a la cercanía de las costas mexicanas del Pacífico con la zona Clarion-Clipperton, una de sumo interés para las trasnacionales mineras. 

“No oponerse a la industria de la minería en aguas profundas significa ser incongruente con ese compromiso para proteger el océano que México manifestó el día de ayer al firmar el Tratado Global de los Océanos. Para no poner en riesgo su credibilidad y reiterar su compromiso, México debe también oponerse a la minería en aguas profundas y apoyar una moratoria a esa industria.” manifestó Ornela Garelli, campañista de Protejamos los Océanos de Greenpeace México. 

De acuerdo con Greenpeace y otras organizaciones, la minería en aguas profundas es una industria destructiva que amenaza la vida en el mar profundo. Por ello,  además de firmar el Tratado Global por los Océanos,  es necesario también comprometerse en muchos otros aspectos para proteger la biodiversidad marina y el equilibrio que presenta este pulmón azul para la vida en la Tierra de otras amenazas como lo es la minería submarina. 

México no es congruente en tanto no se oponga también a la minería en aguas profundas. Al igual que otros 21 gobiernos, México debe impedir la destrucción del océano y apoyar una moratoria a la minería en aguas profundas.

Contactos de prensa 

Dana Olguín | Coordinación de comunicación y medios | +52 1 55 4084 5320 | [email protected]

###

Greenpeace México es una organización política y económicamente independiente tanto de empresas como de gobiernos. Las donaciones de personas como tú, son la única fuente de nuestros fondos. Dona ahora y ayúdanos a mantener la independencia que necesitamos para hacer campañas y conseguir un cambio real.