– El Hidden Gem salió del puerto de Manzanillo rumbo al pacífico el 13 de septiembre a realizar exploración para minería en aguas profundas entre México y Hawai.
– Activistas exigen que los países impongan moratorias contra esta actividad contaminante que deriva en el uso de maquinaria en el océano generando enormes cantidades de sedimentos que dañan los ecosistemas.

Manzanillo, Colima a 16 de noviembre del 2022. Activistas de Greenpeace han confrontado pacíficamente al Hidden Gem, un enorme barco de perforación de minería en aguas profundas, a su regreso al puerto de Manzanillo desde el Pacífico. 

El Hidden Gem, encomendado por la minera canadiense The Metals Company, acaba de regresar tras ocho semanas de pruebas de extracción en la Zona Clarion Clipperton que se encuentra entre México y Hawái. El barco planeaba extraer 3.600 toneladas de nódulos polimetálicos del lecho marino en una prueba que podría sentar las bases para la minería comercial a gran escala. 

Activistas de Greenpeace y Nueva Zelanda confrontan al barco de minería en aguas profundas en las costas de Manzanillo en Colima. Fotografía: Gustavo Graf / Greenpeace

Los activistas se encontraron con el Hidden Gem en un kayak mientras sostenían una manta que decía “Alto a la minería submarina”, mientras que el activista de Greenpeace, James Hita, entregó un mensaje al capitán del Hidden Gem por radio.

“Estamos aquí hoy porque la minería en aguas profundas amenaza la salud del océano, la vida y el sustento de todas las personas que dependen de él. Los océanos albergan más del 50% de la vida en el planeta y es uno de nuestros mayores aliados en la lucha contra la crisis climática. No nos quedaremos de brazos cruzados mientras las empresas mineras comienzan a saquear el lecho marino para obtener ganancias. Desde una pequeña lancha en el puerto de Manzanillo, enviamos este mensaje al capitán del Hidden Gem”

Dijo Hita. 

“Nuestro mensaje es claro: no se debe permitir que continúe la minería en aguas profundas. Representamos las voces de miles de personas en todo el mundo. Este movimiento es liderado por la gente que habita el Pacífico, quienes representan la oposición a esta industria destructiva que se fortalece cada día con un colectivo de organizaciones y un número creciente de gobiernos que piden una moratoria. Hasta la fecha, los gobiernos de Palau, Samoa, Fiji, Alemania, Francia y mi país de origen, Aotearoa, Nueva Zelanda, han escuchado y declarado su respaldo a por lo menos una moratoria. Vemos un futuro donde el océano que nos conecta y nos nutre está prosperando. Un futuro en el que se proteja la forma de vida de las personas y se respete su conexión espiritual con el océano, y la minería en aguas profundas no tiene cabida en este futuro”.

Concluyó Hita.
James Hita, Campañista de Greenpeace Aotearoa envia un mensaje vía radio al Hidden Gem desde la embarcación Tiger. En su mensaje (que puede leerse más abajo) exige al barco que detenga sus actividades. El Hiden Gem es uno de los barcos más grandes en su tipo. Foto: Gustavo Graf / Greenpeace.

A menos que los líderes mundiales tomen medidas para apoyar una moratoria, la minería en aguas profundas podría comenzar en julio del próximo año. The Metals Company ha dicho que planea solicitar una licencia de minería en aguas profundas en 2023 a través de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos.

“Es urgente que países como México y otros en el continente se comprometan con la salud de los océanos. Greenpeace México ha demandando el compromiso con un tratado global que proteja los océanos de la contaminación por plásticos, la pesca industrial, la extracción petrolera, y bloquee los intereses de las grandes empresas extractivistas mineras que están saliendo de puertos en nuestro país a realizar pruebas de minería en aguas profundas. La zona Clarion Clipperton, donde The Metals Company está conduciendo estas pruebas mineras, se encuentra cerca de México. Si esta industria comienza, podría tener graves implicaciones para los ecosistemas marinos alrededor de nuestro país. El planeta y nuestras comunidades ya están sufriendo las consecuencias de la crisis climática y de la pérdida de biodiversidad. No necesitamos una nueva industria extractiva que sólo empeorará la situación.  Por ello, es muy importante que el gobierno mexicano se convierta en un líder regional y global contra la minería en aguas profundas”,

puntualizó Aleira Lara, Directora de campañas de Greenpeace México.
La minería en aguas profundas podría provocar grandes daños a la biodiversidad que habita en estos ecosistemas y que aún no está completamente estudiada. Se trata, además, de una industria aún no regulada. Fotografía: Gustavo Graf /Greenpeace

La minería en aguas profundas implica una gran maquinaria que extrae minerales de las profundidades y los transfiere a barcos mineros, un proceso que produce una gran columna de sedimentos que podría sofocar la vida marina, amenazar el modo de vida de las personas que depende de los océanos y agravar la crisis climática.

Únete a esta lucha y firma la petición para proteger los océanos del mundo.

Imágenes y video están disponibles para su descarga de forma gratuita AQUÍ:

Mensaje enviado por radio al capitán de The Hidden Gem (traducido al español): 

“Hidden Gem, Hidden Gem, Hidden Gem,Este es Tiger nuestra embarcación, aquí Tiger. Solicitamos comunicación. Cambio.

Kia ora, hola, hello. 

Mi nombre es James Hita de Greenpeace y tengo un mensaje para ustedes y para la Metals Company.

No nos acercaremos más a su barco, ni impediremos su paso de ninguna manera. Repito: no nos acercaremos ni impediremos su camino de ninguna manera. 

Estamos aquí como invitados en estas aguas para enviar un mensaje a la empresa para la que trabajan, una compañía canadiense que tiene como propósito causar un daño enorme e irreversible a los océanos si continúa en su búsqueda de llevar a cabo actividades de minería en aguas profundas. 

Mientras mi gente, mi whānau, mi familia están en Aotearoa luchando contra los impactos diarios y persistentes de la colonización. Estoy aquí en Manzanillo, en la costa mexicana, para hacerles llegar este mensaje porque la minería profunda amenaza la salud de los océanos y de las personas que dependen de ellos. Se amenaza nuestro futuro mismo. 
Sabemos que su barco va regresando de llevar a cabo pruebas de minería profunda en aguas del océano Pacífico y les llamamos a ustedes y a la Metals Company a detenerse y desistir en su peligroso proyecto de hacer minería en la profundidad de los océanos de forma inmediata. 

Por largo tiempo, las personas indígenas han sido puestas de lado en nombre de las industrias extractivistas y neocoloniales. La minería profunda es otro ejemplo del poder colonial de explotar las tierras y océanos del Pacífico, sin importarles el modo de vida de las personas, sus fuentes de supervivencia y su conexión espiritual con los océanos. 

Estamos aquí para amplificar las voces de la sociedad civil y llamando  a hacer un alto a esta destructiva industria antes de que gane empuje. Les llamamos a que abandonen sus planes de hacer minería profunda. 
La minería en aguas profundas es una inminente amenaza para los océanos y para la gran variedad de vida marina maravillosa que le llama hogar. Es una amenaza para mi familia y para la tuya. Más de la mitad de toda la vida en la Tierra vive en este ecosistema, que también es uno de nuestros mayores aliados en la lucha contra la crisis climática.

No nos quedaremos de brazos cruzados mientras las empresas mineras como The Metals Company, busquen saquear el lecho marino y diezmar la biodiversidad para obtener ganancias.

La comunidad científica ha advertido que si la minería en aguas profundas continúa, podría poner en peligro la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia de las comunidades que dependen de los océanos. Vemos un futuro donde el océano esté protegido y sea próspero. En este futuro que visualizamos no hay lugar para la minería en aguas profundas.
Sabemos que The Hidden Gem ha estado llevando a cabo pruebas con la intención de extraer 3,600 toneladas de minerales del fondo del océano.

Esta actividad, al amenazar la biodiversidad y correr el riesgo de perturbar el carbono, pone en riesgo la salud de los océanos y, por lo tanto, la salud del planeta.

El movimiento para detener la minería en aguas profundas y las empresas detrás de él es fuerte y está creciendo exponencialmente. En las últimas semanas, los gobiernos de Nueva Zelanda, Alemania, Chile y Francia se han pronunciado en contra de este tipo de minería. Se unen a los gobiernos de Palau, Samoa, Fiji y Micronesia que han respaldado una moratoria y muchos más están expresando su preocupación.

La sociedad civil en el Pacífico y, de hecho, en todo el mundo, está defendiendo la salud de los océanos y pidiendo que se detenga la minería en las profundidades, y Greenpeace está con ellos y ellas. 

Hacemos un llamado a las y los líderes mundiales para que sean audaces y ambiciosos y pidan que se detenga la minería en aguas profundas para proteger el medio ambiente marino. Creemos que la minería en aguas profundas no tiene futuro y les pedimos que deje de saquear el lecho marino.

Somos persistentes y valientes. Waiho papa moana. Dejen el fondo de los océanos en paz.