En los últimos meses el tema de la seguridad vial acaparó el debate público por la muerte de jóvenes ciclistas y peatones en accidentes viales en diferentes ciudades del país, razón que puso en el reflector la necesidad de una ley general de seguridad vial que aún está pendiente de discutir.

En ese sentido resulta curioso -por decir lo menos- que el gobierno de la Ciudad de México haya modificado el Reglamento de Tránsito, que entre otras cosas, contempla la reclasificación de algunas avenidas para que pasen de ser vías primarias a vías de acceso controlado, lo que significa aumentar la velocidad de 50 a 80 kilómetros por hora (km/h).

Tomada de excélsior.com.mx https://www.excelsior.com.mx/comunidad/aumentan-limite-de-velocidad-en-vialidades-capitalinas/1302695

¿Quién se beneficia con esta decisión? Los automovilistas, por mucho. De acuerdo con el Secretario de Movilidad de la Ciudad de México, Andrés Lajous, la medida responde a la realidad de esas avenidas, pues nadie respetaba el límite de velocidad establecido.

Desde un enfoque de las ciudades que queremos, donde las calles sean para todas y todos, el aumento de la velocidad significa mayor riesgo para peatones, quienes se encuentran el nivel más alto de la pirámide de movilidad y deberían tener prioridad, por encima, incluso de  ciclistas, que con las modificaciones al reglamento ahora podrán circular en banquetas y zonas peatonales.

 

La sociedad civil requiere cambios profundos en las calles, para apostar más por un modelo en el que quepamos  todas y todos, lo que significa contar con infraestructura específica para cada forma de movilidad: ciclovías para ciclistas, banquetas para peatones y arroyo vehicular para los autos y el transporte público, como sucede en otras ciudades del mundo, que dicho sea de paso, están apostando por reducir la velocidad de circulación en favor de la seguridad.

Tomada de Revista Tráfico y Seguridad vial http://revista.dgt.es/es/multimedia/infografia/2018/1213-La-velocidad-en-las-convencionales-en-Europa.shtml#.XJVB7ShKjIU

Es cierto que la movilidad en la  Ciudad de México debe mejorar, pero qué tal que empezaramos por tomar medidas que fomenten el uso de transporte público eficiente, de calidad y no contaminante, así como infraestructura ciclista para reducir el uso del automóvil, con lo que también mejoraremos sustancialmente la calidad del aire que respiramos.

¡Exijámoslo y firma la petición!

Urban Revolution Viaduct Protest in Mexico. © Argelia Zacatzi
Exige transporte seguro y sin contaminación del aire

Exijamos más y mejor transporte que nos ayude a mejorar el aire que respiramos en nuestras ciudades

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