El invento del automóvil podría haber revolucionado la vida de la humanidad al permitir acortar grandes distancias. Al inicio ese era su principal objetivo más allá de reducir considerablemente las actividades físicas diarias, sin siquiera suponer que se convertiría en una de las principales fuentes de la contaminación del aire en nuestro planeta. 

El ajetreo diario en las grandes ciudades ha normalizado situaciones que no deberíamos aceptar de esa manera, es decir, vivir en una ciudad nos remite directamente a horas valiosas de nuestra vida perdidas en el tránsito desquiciante, a aspirar humo constantemente, al ruido del cláxon y en muchas ocasiones al mal humor de otros conductores.

Tráfico en Ciudad de México

Tráfico en Ciudad de México

La sobreexplotación de su uso raya en el ridículo de utilizarlo para hacer recorridos realmente cortos que podrían realizarse caminando o en bicicleta y, en el caso de los más largos, combinar la caminata en algún tramo con un medio de transporte público. Peor aún, hay un porcentaje alto de coches circulando con un solo pasajero, lo cual incrementa que el espacio urbano sea utilizado exclusivamente para los autos, un paisaje urbano bastante deprimente. Y aquí no me refiero a la población que por estudio o trabajo tiene que recorrer grandes distancias.

Si a esto le agregamos que seguir anclados al auto nos hace dependientes de los combustibles fósiles y que la quema y extracción de petróleo incrementan el cambio climático, el resultado no es nada alentador.

Air Pollution Protest in Mexico City. © Ilse Huesca Vargas / Greenpeace

El aire en México mata, protesta en ciudad de México

Si después de estas razones sientes que no puedes independizarte completamente del auto, aquí te comparto algunas medidas que puedes ir practicando y replicando mientras logras liberarte de tu amado auto:

  • Compartir el auto reducirá la cantidad de coches circulando, por lo tanto también será menor el grado de emisiones de humo, carbono, nitrógeno, azufre y otros gases, mejorando la calidad de nuestro aire.
  • Los combustibles mal quemados son de los principales contaminantes, revisar constantemente la batería y sistemas de encendido de tu auto va a contrarrestar ese problema
  • Revolucionar el motor más allá de la cuenta en una ciudad en la que está prohibido ir a grandes velocidades contamina mucho. Lo recomendable es salir siempre en primera e ir subiendo gradualmente. En el trayecto permanecer lo más posible con una velocidad constante para producir menos combustión, en vez de ir acelerando y frenando innecesariamente. 
  • Evita acelerones, no te hacen ver bien aunque creas lo contrario, contaminan el aire, además de las molestias que el ruido provoca.
  • El tubo de escape y su sistema es nuestro mejor amigo ya que su función es atrapar al máximo sustancias nocivas que pueda desprender nuestro auto, revísalo constantemente.
  • No dejar el auto en marcha, no importa si estás esperando a alguien por un minuto o por 5, lo mejor es apagar el motor. 
  • Únete al #ViernesSinCoche, dejar aunque sea un día el auto puede ayudarte a tener un descanso del estrés del auto, quitarás un auto más de las calles y podrás darte cuenta de los beneficios de independizarte del auto
  • Haz trayectos cortos caminando o en bicicleta, no es necesario llevar el auto a todos lados.

Reducir gradualmente del uso excesivo de tu auto hará que gastes menos en gasolina, seguro, mantenimiento, hará que dejes de preocuparte por estacionarlo en un lugar seguro e incluso optar por una agradable caminata o usar bicicleta, reducirá un buen porcentaje de estrés. Lo mejor de todo, vas a reducir tu huella de carbono considerablemente y por lo tanto contribuirás a frenar el cambio climático. Suena liberador ¿no?

Firma esta petición y exige transporte seguro, eficiente y no contaminante

Urban Revolution Viaduct Protest in Mexico. © Argelia Zacatzi
Exige transporte seguro y sin contaminación del aire

Exijamos más y mejor transporte que nos ayude a mejorar el aire que respiramos en nuestras ciudades

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