Las y los mejores científicos del clima en el mundo se reunieron para evaluar la situación del cambio climático en el mundo. El resultado fue: ¡necesitamos acciones urgentes y ambiciosas para detener la emergencia climática que está afectando ya a comunidades enteras!

Luego de dos años de trabajo exhaustivo, las y los científicos produjeron el Sexto Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés), Bases de la Ciencia Física del cambio climático.

Este documento sintetiza la más reciente comprensión científica de qué está pasando con nuestro sistema climático y da una rigurosa alerta sobre qué enfrentaremos si no se toma acción urgente.

¿Las conclusiones? El Reporte del IPCC señala que ahora es un momento decisivo para la humanidad porque el cambio climático empeora rápidamente, lo que sólo podría frenarse con una acción climática urgente. 

Entre los principales hallazgos de esta investigación se encontró que desde el último reporte la temperatura de la superficie global ha aumentado fuertemente. Los últimos 5 años han sido los más calientes desde 1850. Además, el nivel de aumento del nivel del mar y derretimiento de glaciares y capas de hielo se ha acelerado 

“Esto es solo el comienzo si seguimos agregando emisiones a la atmósfera: cada tonelada de GEI empeora la situación”, dice el reporte.

De acuerdo con las y los científicos, mantener el incremento de 1.5° celsius hará los cambios futuros más pequeños y manejables. No obstante, al paso que vamos, el presupuesto de carbono para mantenernos en la meta del 1.5° se agotará antes del 2030.

La investigación es contundente al señalar que en algunos casos el daño es irreversible y que algunos cambios en los sistemas climáticos a largo plazo ya son inevitables sin importar lo que hagamos, resultando en la continuada pérdida de hielos, aumento en el nivel del mar y cambios en el océano. 

Al respecto de ello, la especialista en Política Climática de Greenpeace Internacional, Kaisa Kosonen, señaló: “mientras muchos gobiernos se mueven lentamente hacia metas de emisiones engañosas, la actual crisis climática afecta a comunidades enteras con feroces incendios, inundaciones extremas y sequías prolongadas. Si los gobiernos no profundizan en sus actuales y débiles metas de disminución de emisiones para el año 2030, la humanidad podría perder.

Afectados de la tormenta Cristobal en Yucatán / © Greenpeace/ Robin Canul
© Greenpeace/ Robin Canul

En el caso mexicano, las aportaciones del IPCC coinciden con la exigencia de Greenpeace México en el sentido de descarbonizar al país a la brevedad.

“México es un país altamente vulnerable al cambio climático, cada año somos testigos de sus impactos cada vez más devastadores, desde sequías, altas temperaturas, incendios forestales, huracanes e inundaciones, la población de nuestro país está viviendo los estragos de la crisis climática. Sin embargo, las insuficientes metas de reducción de emisiones comprometidas en los Acuerdos de París y en las leyes nacionales están siendo ignoradas, dando una total prioridad a la agenda fósil en la política energética nacional. Este reporte nos vuelve a recordar que la acción climática es impostergable y que los gobiernos del mundo, incluidos el mexicano, tienen que asumir su responsabilidad histórica de reducir drásticamente las emisiones de GEI”, advirtió Pablo Ramírez, especialista en Energía y Cambio Climático de Greenpeace México.

¿Qué sigue? Los hallazgos del IPCC son un llamado a la acción urgente. Tenemos que responsabilizar a los gobiernos y corporaciones, sobre todo la industria fósil, por la crisis climática y exigir estrategias ambiciosas para reducir emisiones, sin falsas soluciones. El planeta ya no tiene más tiempo para mantener acciones engañosas; cada día cuesta. 

¡Firma para exigir estrategias ambiciosas y combatir la crisis climática!

Emergencia climática

Necesitamos acción climática urgente y contundente, tenemos que dejar el petróleo bajo tierra y transitar hacia una economía limpia, sustentable y equitativa. El gobierno tiene que respetar los acuerdos que el país ha adoptado tanto nacional como internacionalmente y que están plasmados en las leyes mexicanas.

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