Ser activista medioambiental en el mundo de hoy es un desafío monumental, más aún en Colombia, el país con más líderes ambientales y sociales asesinados, pero como organización que defiende a la naturaleza, ¿cómo no estar presentes en un país megadiverso, una sinfonía de especies, colores y ecosistemas en el que habita una de las mayores riquezas naturales del mundo, la Amazonía, así como una variedad de vida asombrosa y; además, el Pacífico colombiano (o Chocó Biogeográfico que alberga cerca del 11% de la biodiversidad del planeta), entre otros muchos motivos?
Desde entonces, el apoyo y la participación activa de los colombianos han sido los pilares que garantizan 15 años de independencia política y económica en Colombia. Nuestro trabajo busca inspirar esperanza a través de la acción, brindando una voz a este planeta frágil y maravilloso que habitamos exigiendo de manera pacífica y con acciones directas, con creatividad y disrupción, con convicción y lo más importante: sin timidez.
Hicimos un llamado urgente a quienes toman decisiones que impactan nuestro presente y futuro, estableciendo límites claros y sentando precedentes en escenarios clave.
Esto se logró gracias al respaldo de la ciudadanía y los movimientos sociales, así como al apoyo de periodistas y organizaciones comprometidas con los derechos sociales y ambientales. Sin su colaboración y compromiso, nada de esto hubiera sido posible.
Pero este es solo un hito en el camino que nos queda. Renovamos nuestros votos de compromiso para buscar la reducción de contaminación y crisis climática, conservación de los ecosistemas desde los páramos hasta nuestros océanos y la protección de la biodiversidad.
En poco tiempo, tenemos por delante un desafío sin precedentes: la COP16. Este 2024 Colombia recibirá a las delegaciones del mundo para definir el futuro de nuestro planeta. El país será anfitrión del evento de biodiversidad global más importante, en el que 196 países discutirán y buscarán soluciones a problemas de nuestro planeta para poder detener y revertir la pérdida de biodiversidad para el año 2030.
Estamos más que felices del camino que hemos recorrido.
Gracias por ser parte de la historia de Greenpeace en Colombia y ayudarnos a defender el planeta donde vivimos. Queda mucho por hacer, así que vamos por más.