Nuestro país esperaba a Greenpeace y este le abrió su corazón dando voz a este planeta frágil y maravilloso que habitamos.
Desde entonces, y gracias a todas las personas que nos apoyan, nuestra historia de independencia y de campañas para la defensa del medio ambiente en Colombia ha conseguido todos estos triunfos:
Fuimos parte del movimiento #ColombiaSinAsbesto y hoy la prohibición de esta fibra cancerígena es una realidad.
En 2019 la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley Ana Cecilia Niño que prohíbe producir, usar, comercializar y exportar asbesto en nuestro país. Este logro es el resultado de dos años de trabajo junto a organizaciones civiles, la Fundación Ana Cecilia Niño, universidades, ministerios, entidades médicas y científicas. Miles de personas se unieron al movimiento #ColombiaSinAsbesto y su presión no fue ignorada. Después de siete intentos fallidos en el Congreso, la prohibición de esta fibra cancerígena es una realidad.
Logramos la aprobación del proyecto de ley que establece la reducción gradual de la producción y el consumo de plásticos de un solo uso después de años de impulsar la campaña #MejorSinPlásticos.
En 2022 el Congreso aprobó el proyecto de ley que establece medidas para reducir la producción y el consumo de productos plásticos de un solo uso. Después de cuatro años logramos este gran avance gracias a nuestra campaña #MejorSinPlásticos y el trabajo de diferentes organizaciones.
Conseguimos que la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, ratifique la Declaratoria de Emergencia Climática para la capital. Desde Greenpeace impulsamos la iniciativa a través de la campaña Nuestra Nueva Ciudad.
En 2020 la alcaldesa de la ciudad, Claudia López, ratificó la Declaratoria de Emergencia Climática que había sido aprobada por el Concejo de Bogotá. El proyecto establece objetivos claros y mandatos específicos para tomar medidas contra el cambio climático y mitigar sus efectos. Desde Greenpeace impulsamos la iniciativa a través de la campaña Nuestra Nueva Ciudad
Frenamos un proyecto de explotación en el Páramo de Santurbán.
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) decidió archivar el pedido de licencia ambiental que la empresa Minesa (Sociedad Minera de Santander) había solicitado para operar en el Páramo de Santurbán. ANLA se opuso al proyecto debido a los impactos ambientales que produciría en la zona. Previamente, apoyamos a las comunidades locales y recurrimos a la Justicia, junto con otras entidades medioambientales, para solicitar medidas cautelares y detener los trabajos mineros que Minesa estaba realizando en el páramo de Santurbán.
Logramos la prohibición de la minería en el Páramo de Pisba después de más de cinco años de trabajo junto a comunidades de Tasco, Socha y Socotá, del departamento de Boyacá.
En 2016 la minera Hunza Coal debió abandonar parte de sus operaciones en el Páramo de Pisba. La Corporación Autónoma Regional de Boyacá, Corpoboyacá, máxima autoridad ambiental del departamento, inhabilitó una de las minas de carbón de la multinacional minera Hunza Coal. Además, le ordenó presentar un plan de cierre y abandono, en un plazo máximo de 45 días, con el fin de restaurar el área afectada. Conseguimos este avance después de dos años de campaña para pedir la prohibición de la minería en el Páramo de Pisba.
Sin dudas, esta ha sido una tarea colectiva que solo fue posible gracias al respaldo y compromiso de nuestros seguidores, socias y socios, voluntarios, activistas, aliados y personas que aman la causa ambiental.