Mendoza
© Daniela Vaca Coria / Greenpeace

Instalados en los zonas concurridas de las ciudades de Rosario, Mar del Plata, Mendoza, Posadas, Salta y Buenos Aires, voluntarios y voluntarias de la organización invitaron a los transeúntes a participar este fin de semana del desafío del tomate: probar uno agroecológico y uno producido en forma industrial, y elegir cuál tiene más y mejor sabor

Buenos Aires  © Marcela Casarino / Greenpeace.
Buenos Aires © Marcela Casarino / Greenpeace.

“Estuvimos compartiendo con la gente la experiencia de saborear un tomate natural, sin químicos. Que cada uno, cada una pudiera comparar y evaluar por sí mismo, si efectivamente había o no diferencias en el sabor, más allá de las características que racionalmente se pueden describir de la agroecología”, contó Leonel Mingo, coordinador de campañas de Greenpeace en Argentina. “Fue muy interesante ver las reacciones, algunos verdaderamente se sorprendieron”.

Mar del Plata © Victoria Di Césare / Greenpeace

Con este desafío, la ONG evocó la iniciativa de hace algunos años de marcas famosas que invitaban a contrastar su producto con el de sus competidores. En este caso, la idea fue poner a prueba el paladar de los consumidores e invitarlos a comprobar por sí mismos la diferencia de sabor entre los tomates producidos en formas diferentes

Salta © Paula Aguero / Greenpeace.

El evento formó parte de la campaña #TomateChallenge iniciada en las redes sociales hace dos meses junto a Damián Betular, para difundir las ventajas de comer alimentos sanos y ricos. 

Rosario © Silvana Hernández / Greenpeace

La agricultura agroecológica es un sistema de producción que proporciona alimentos sin agroquímicos ni cultivos modificados genéticamente, que respeta los ciclos de la naturaleza y que garantiza mejor sabor y calidad. Este tipo de producción protege la biodiversidad, cuida el agua y la riqueza del suelo, y tiene mejor rendimiento: produce más alimentos por hectárea que en la agricultura convencional y se combinan diferentes cultivos en el mismo campo. 

Semillas agroecológicas © Marcela Casarino / Greenpeace.

“Vamos a seguir compartiendo propuestas que acerquen a la ciudadanía este modo de producir y comer que es sano, es más rico y es beneficioso para el ambiente; no es más costoso y en la medida en que se expanda será cada vez de más fácil acceso”, señaló Mingo.

La agricultura sustentable es posible

¿Sabés cómo se producen los alimentos que comés todos los días? ¿Qué consecuencias provocan los agrotóxicos?

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