Greenpeace rechaza el estímulo de la caza de fauna nativa en la provincia de Chubut normado por la ley XVII-N°52, que promueve la matanza del zorro colorado y por extensión los ganaderos, la aplican al Puma, y crea una Comisión de Control de las Especies Depredadoras de la Ganadería, integrada sólo por la Sociedad Rural de la provincia.
No todos los pumas y zorros predan sobre el ganado, el Grupo de Estudio de Mamíferos Terrestres del IPEEC-CONICET, que trabaja junto a productores ganaderos de Chubut en la búsqueda de soluciones a este conflicto, ha demostrado que medidas como la caza o uso de cebos envenenados no han resultado efectivas para reducir las pérdidas de ganado.
Las leyes nacionales 22.421, y 25.675 establecen normas de protección y conservación a la fauna silvestre y a la diversidad biológica, declarando de “interés público” a la fauna silvestre que habita el territorio de la República y estableciendo que “todos los habitantes de la Nación tienen el deber de protegerla”.
Las principales amenazas que enfrenta el Puma son la pérdida y fragmentación de hábitat, disminución de sus presas naturales y la caza furtiva. La especie experimenta una tendencia poblacional a la baja y extinciones locales.
En cuanto al Zorro Colorado no se conoce aún el estado de las poblaciones lo que es un impedimento para evaluar su estatus de conservación, siendo considerado a nivel nacional Casi Amenazado.
Greenpeace se opone a la caza de fauna silvestre, y exige al Gobierno de la provincia de Chubut, que tome las medidas necesarias para solucionar este problema, protegiendo la fauna nativa bajo su tutela en vez de alentar su caza
