Apertura de sesiones ordinarias en el Congreso Nacional.

A horas de la inauguración del período legislativo en el parlamento nacional, Greenpeace recordó los temas ambientales que requieren atención urgente y deberían estar presentes en la agenda propuesta a los representantes. 

Los incendios recientes en la provincia de Corrientes, que dejaron más de 900 mil hectáreas quemadas, de las cuales más de la mitad eran humedales, volvieron a poner en primer plano la necesidad, no sólo de reforzar los sistemas de manejo del fuego y atención a estas catástrofes, sino de proteger de modo urgente estos ecosistemas. 

Desde Greenpeace recordaron además que nuestro país se encuentra entre los diez que más desmontaron en las últimas tres décadas, período en que se perdieron 8 millones de hectáreas de bosques, y que la deforestación en el norte argentino pone en riesgo de extinción al yaguareté, una de las especies emblemáticas de la región.

“Es hora de que la destrucción de ecosistemas clave como son los humedales y los bosques sea entendida como lo que es, un ecocidio. Las políticas públicas deben avanzar en ese sentido y garantizar que los incendios intencionales y los desmontes sean considerados un delito penal”, dijo Diego Salas, director de programas de Greenpeace. “Estos últimos meses hemos presenciado eventos ecológicos trágicos. La crisis climática ya está acá y la sequía es uno de sus impactos más palpables y, junto al fenómeno de La Niña aumentaron las condiciones para que sucedan; pero los incendios en bosques y humedales no son nuevos, se repiten todos los años y la mayoría de ellos son intencionales; hay que detenerlos.”

Por otra parte, el portavoz de la organización se refirió a la necesidad de protección del Mar Argentino frente al avance de la industria petrolera, para la preservación de la biodiversidad marina -especialmente en áreas de alimentación y tránsito de especies-, y la economía de las comunidades costeras..
Por último, Salas se refirió a los impactos de la pesca ilegal: “Esperamos que se retomen los debates en el Congreso para que finalmente se le dé tratamiento al proyecto de Ley de área marina protegida bentónica Agujero Azul, que impulsa la protección del lecho marino en la plataforma extendida Argentina, un primer paso para proteger el ecosistema del Agujero Azul”.