El humo de los incendios forestales que continúan activos en Bolivia, Brasil y Paraguay llegó a gran parte de nuestro país y puso en alerta a 10 provincias, incluyendo el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), ante la posibilidad de que se dé el fenómeno de “lluvia negra”

Vista aérea de incendios forestales en Pantanal, Brasil, agosto 2024.

La “lluvia negra” es un tipo de precipitación que se produce cuando el humo choca con frentes fríos, con la particularidad que el agua se ensucia y arrastra partículas contaminantes a la superficie. Esto es peligroso porque provoca daños en el entorno natural y en la salud de las personas.

El Servicio Meteorológico de Brasil (MetSul) y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en Argentina han advertido que ya está impactando en amplias zonas del país donde se prevé que el fenómeno continúe y se intensifique durante los próximos días, en especial cuando se den las condiciones de alta humedad y frentes fríos que favorezcan las lluvias contaminadas. 

Al mismo tiempo, la presencia del humo reduce la calidad del aire y puede derivar en síntomas como tos, dificultad para respirar e irritación ocular. Por lo tanto, las autoridades sanitarias recomiendan limitar las actividades al aire libre y utilizar mascarillas adecuadas para protegerse de las partículas suspendidas.

¿Qué es la lluvia negra?

Como mencionamos, es un tipo de precipitación que se genera en zonas donde hay contaminación ambiental en el aire. Por eso es muy común que ocurra en zonas con intensa actividad industrial, uso extensivo de carbón y petróleo o grandes incendios forestales.

Vista aérea de incendios forestales en Pantanal, Brasil, agosto 2024.
Estudio aéreo en el sur de Amazonas y el norte de Rondônia para monitorear la deforestación y los incendios en julio de 2024.

A medida que el humo (que contiene hollín, carbono negro o cenizas) se mezcla con la humedad y los sistemas meteorológicos, se producen lluvias contaminadas que arrastran partículas peligrosas a la superficie. Como resultado, la calidad del aire y la visibilidad se ven afectadas mientras el agua puede arrastrar sustancias tóxicas que afectan el suelo, el agua potable, la vegetación e incluso las infraestructuras. 

Se la llama “negra” aunque eso no implica que tenga ese color. En realidad, se refiere al hecho de que las gotas son turbias debido a la presencia de contaminantes. 

¿Dónde puede darse la lluvia negra en Argentina?

En medio de los graves incendios forestales que afectan a los países limítrofes, la circulación de los vientos predominantes del norte trajo el humo a las regiones del norte y centro de nuestro país. Así es que, desde ayer, son varias las provincias que se encuentran expuestas a aire más contaminado, un cielo totalmente opaco y visibilidad reducida. 

Incendios forestales en Pantanal, Amazonas. Agosto 2024.

En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió que las provincias más afectadas por la lluvia negra serán Misiones, Corrientes, Formosa, Chaco, Santiago del Estero, Santa Fe, Tucumán, Jujuy, Salta, Catamarca y la provincia de Buenos Aires, incluyendo el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

 Las partículas que están suspendidas incluyen componentes como dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno, que pueden interactuar con la humedad y formar lluvia ácida, dañando ecosistemas y causando efectos en la salud.

Se prevé que el humo continúe desplazándose hacia el sur durante los primeros días de la semana, y que el fenómeno persista al menos hasta el fin de semana, cuando las condiciones climáticas podrían empeorar con lluvias y tormentas aisladas.

¿Cuáles son los efectos para la salud y cómo evitarlos?

"¿Ansiedad innecesaria? mi vista durante la última semana." Activistas en la manifestación sobre incendios forestales y emergencia climática en Sydney.© Dean Sewell / Greenpeace
“¿Ansiedad innecesaria? mi vista durante la última semana.” Activistas en la manifestación sobre incendios forestales y emergencia climática en Sydney. © Dean Sewell / Greenpeace

La presencia de humo y la lluvia negra pueden producir irritación ocular y de las vías respiratorias; posibles infecciones respiratorias, daño celular así como aumentar el riesgo de complicaciones en personas con problemas preexistentes. Ante esto, las recomendaciones emitidas por Ministerio de Salud de la Nación son:

Limitar la exposición al aire libre, especialmente durante los días en los que se espera mayor concentración de humo en la atmósfera. 

Las personas con condiciones preexistentes (como  enfermedades respiratorias crónicas, como el asma, la EPOC, alergias y cardiovasculares) deben estar especialmente atentas a cualquier síntoma de empeoramiento y buscar atención médica en caso de ser necesario.

Mantener puertas y ventanas cerradas para evitar que las partículas ingresen en los hogares, así como utilizar mascarillas adecuadas para quienes deban permanecer al aire libre.

Evitar actividades físicas intensas al aire libre y mantener los espacios interiores lo más libres posible de contaminantes, usando aire acondicionado en modo ventilación o recirculación y evitando encender velas o chimeneas.